UN GIGANTE LLAMADO DUDA |

Mateo 28:17 "Y cuando le vieron, le adoraron; pero algunos dudaban".

Ten cuidado de que este virus se vaya infiltrando en tu corazón, la duda es el retardador de promesas y bendiciones que Dios tiene para ti, la duda hace que seas inconstante en tu camino, hace que te desesperes, que te desanimes, hace que donde pones tus pies, ya no sea firme y te empieces a hundir así como Pedro, que llores de angustia e impotencia, la duda estorba tu oración y adoración a él. La fe hace que aún no viendo creas, por la duda aún viendo no creerás.

La duda hace ver un milagro de Dios como un acto científico, la duda te hará pensar que desciendes del mono, la duda creé en las casualidades, no en el plan perfecto de Dios en tu vida, te hará pensar que eres incapaz e inservible, por ella no das pasos firmes, por ella no llegas a la meta. "La duda, duda de la misma duda", atrae negatividad, hace que solo desees y no alcances, te vuelve ciego, la duda te hará pensar que no hay Dios. 

Olvida esta palabra de una vez por todas y cámbiala por fe y convicción, la fe se compone sólo de dos letras, pero por ella las montañas se mueven y los mares se abren, el sol se para y la lluvia cae, la fe hace que las cosas sucedan. 

¡Ten fe en Jesucristo y no dudes en seguirlo, porque él cambiará tu vida!