2º de Corintios 5:20 "Así que, somos embajadores en nombre de Cristo, como si Dios rogase por medio de nosotros; os rogamos en nombre de Cristo: Reconciliaos con Dios".
¿Alguna vez te han rogado para alguna cosa y tu insistes negativamente? Pues también el que ruega se llega a cansar, pero es sorprendente el amor de Dios para conmigo, cada día que me da de vida, cada minuto y segundo, insiste que le busque, debería ser lo contrario si yo soy el que lo ofendo, niego y aborrezco, ¿Por qué él me busca primero y me insiste en que lo siga?
Esto me recuerda a mis padres que siempre me rogaban que estudiara, y es que ellos pensaban en mi futuro y yo solo pensaba en disfrutar mi presente, esa es la razón de por qué Dios te ruega todos los días, tú piensas en tu presente, pero Dios piensa en tu futuro. Él es tu padre y te desea lo mejor, a él le duele pensar el hecho de que si no te reconcilias, vas a sufrir toda una eternidad.
Vamos, ¡no seas rogado!, decídete de una vez, tú eres el que al final vas a salir ganancioso.
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