lunes, 22 de mayo de 2017

TODA LA GLORIA SEA PARA ÉL |



Jueces 13:16 "Y el ángel de Jehová respondió a Manoa: Aunque me detengas, no comeré de tu pan; mas si quieres hacer holocausto, ofrécelo a Jehová. Y no sabía Manoa que aquél fuese ángel de Jehová".

¿De quién provienen los milagros y las bendiciones? Tiene Dios un ejército celestial que le sirve y aún tú puedes ser un instrumento que el Señor utilice para tratar con otros personas. Al Señor es a quién debe darse toda la honra, honor y reconocimiento, por eso este ángel enviado de Dios no permitió que Manoa le ofreciera holocausto porque es algo que sólo le corresponde a Jehová.  Manoa tenía la gran necesidad de agradecer el milagro de que su esposa estéril concebiría un hijo.

Esto no significa que no debemos ser agradecidos cuando obtenemos ayuda de otras personas, por supuesto que el Señor se agrada de eso, pero debemos entender que todas las personas, situaciones y circunstancias es Dios mismo quien las utiliza a tu favor. Una persona, un pastor no puede estar por encima de Dios, un santo, una estatua no te concebirá nada. 

El Señor es quién da conforme su voluntad y propósitos.

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